El Artesano y los DiguenavoyBogadé

Ayer, durante la tradicional birra post-ensayo, el Uri (el Frailero Mayor) tuvo el detallazo de abrir una botella de cava y estuvimos brindando todos por el nuevo disco. En un momento de nostalgia pusimos en la minicadena nuestro primer disco, "El Artesano", al que nunca hacemos mucho caso y que muchas veces tendemos a infravalorar nosotros mismos, seguramente porque sabemos que se grabó sin experiencia, sin tiempo y con cuatro duros...

...pero resulta que todo lo que a día de hoy es el grupo está ahí, en esas canciones y en esa galleta María. Con los arreglos justos y en fase embrionaria, pero está ahí. Reflexiónnnn. El nuevo disco, que tanto nos motiva hoy, seguramente le debe mucho más a “El Artesano” que a “Bienvenidos al teatro”. Al final el Tutti hizo una lista de temas antiguos que quería volver a tocar y, qué coño! algún día, no se sabe cuando, estaría bien rebobinar la cinta y tocar otra vez temas como “Desterrado”, “Puntos Suspensivos”, “Te estás quemando”, “Flor de cenicero”... Es algo que queda pendiente para el futuro.

Paréntesis: [ Somos el grupo europeo con más proyectos iniciados sin concluir que, probablemente, nunca se llevarán a cabo. Ejemplos: el disco de Pura Madera, el grupo experimental “Policía Local”, el álbum de versiones de Junco, ir a Andorra a comprar una cámara de fotos personal e intransferible o grabar de una vez la puta maqueta de “Los de Frailes”... Es un detalle significativo que habla de nuestra personalidad inconstante. ]

Paréntesis II: [Escuchando “El Artesano”, se da cuenta uno de lo importante para la salud de un conjunto musical que es hacer lo que te da la gana, con respeto, claro, pero a la vez faltando al respeto a algunas leyes musicales que no sé por qué cojones nadie se cuestiona. Conclusión: Cuanta mierda producida solamente para salir en la radio. Conclusión 2: Cuantas buenas ideas se quedan en el olvido sólo porque no se ajustan a lo que debe ser un single o porque ‘no es comercial’... Conclusión 3: que bonito era (y es) no tener ni puta idea de leyes musicales, y saltarse todos estos dilemas.] Fin de los paréntesis.

El ensayo de ayer, bien. Algunos temas del nuevo disco empiezan a sonar y a emocionarnos. Empezamos la cuenta atrás para el bolo de Razzmatazz. Hay ganas.

Rebobinar la cinta...

Al final el Uri nos puso un video antiguo de los DiguenaVoyBogadé, de sus primeras y gloriosas épocas con el caballero enmascarado en la guitarra, el vaca cantando, el kike en la batería y el jep en el bajo. Un video en el que, por cierto, salímos los DCP de público, con 15 o 16 años. Injusto mundo en el que la (probablemente) mejor banda del vallès y (seguro) la más original musicalmente hablando, quizá no consiguió el reconocimiento merecido, aunque esté dentro de los corazones de bastantes incondicionales como nosotros. Escuchen sus discos, es nuestra recomendación de hoy.

Hacer un homenaje a los DiguenaVoyBogadé. Otro proyecto pendiente. Se nos ha girao faena, que dice el Tutti.